El 4 de julio, el Partido Laborista logró 412 escaños de los 650 que hay en la Cámara de los Comunes, frente a los 121 del Partido Conservador, que obtuvo su peor resultado. Con una mayoría absoluta, el líder laborista, Keir Starmer, reemplazó al conservador Rishi Sunak como nuevo primer ministro, luego de recibir del rey Carlos III el encargo de asumir el mandato. Starmer deberá resolver problemas como impulsar una economía en recesión, reparar el sistema sanitario y restablecer la confianza en el Gobierno del país.