Los días 23 y 24 de mayo se llevó a cabo la primera Cumbre Humanitaria Mundial en Estambul, Turquía, con el fin de reforzar los lazos de cooperación internacional en materia de ayuda humanitaria para prevenir y solucionar los conflictos del actual mundo globalizado, así como para reestructurar el sistema de ayuda humanitaria de las Naciones Unidas para mejorar las formas de atención a las necesidades humanitarias.
Esta Cumbre se realizó por iniciativa del Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, derivada de su gran preocupación por el aumento de los conflictos armados y Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques 2 las graves consecuencias humanitarias. Con el apoyo de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus sigla en inglés) se organizaron siete mesas redondas de líderes de alto nivel, quince sesiones especiales y diferentes eventos paralelos, en donde líderes políticos, trabajadores de la Naciones Unidas, organizaciones no gubernamentales, empresas privadas e investigadores, analizaron y discutieron las cinco responsabilidades fundamentales de la nueva Agenda para la Humanidad, a saber: 1) Prevenir los conflictos y ponerles fin; 2) respetar las normas de la guerra; 3) no dejar a nadie atrás; 4) trabajar de manera diferente para poner fin a las necesidades; e 5) invertir en la humanidad.