El 26 y 27 de mayo se llevará a cabo la 42ª Cumbre del Grupo de los Siete en Ise-Shima, Japón, con el objetivo de abordar preocupaciones actuales que van desde la desaceleración económica de China y la crisis migratoria hasta la contención de la amenaza norcoreana. De esta manera, los líderes de las economías más industrializadas del mundo (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) se reunirán en el archipiélago, que fue sede por última vez de una reunión del G7 en 2008, cuando el planeta enfrentaba una de las peores crisis financieras de la historia.
En el marco de la Cumbre, el Presidente Barack Obama visitará la ciudad de Hiroshima con el objetico de superar su pasado como naciones enemigas y ofrecer una visión acerca del futuro compartido con Japón. Ningún Presidente estadounidense en funciones ha visitado dicha ciudad, cuyo bombardeo nuclear marcó el fin de la Segunda Guerra Mundial. No obstante, la administración de Obama ha enfatizado que no se trata de una disculpa. Sino que forma parte de los esfuerzos para poner fin a la proliferación nuclear.
Al respecto, el Primer Ministro Shinzo Abe que, al ser la única nación que ha sufrido un ataque nuclear, Japón tienen la responsabilidad de garantizar que esa experiencia no se repita en ningún lugar del mundo. Sin embargo, los esfuerzos hasta ahora desplegados por el gobierno estadounidense han tenido resultados encontrados y la ausencia de Rusia, tanto en el G7 como en la más reciente Cumbre de Seguridad Nuclear, ha dificultado los avances en la materia.