El 22 de abril, Paraguay celebró elecciones generales y departamentales para elegir al sucesor del actual Presidente Horacio Cartes, así como al Vicepresidente, a los legisladores del Congreso Nacional, Gobernadores, Concejales Departamentales y parlamentarios integrantes del Mercosur. Con una participación del 61,4%, Mario Abdo Benítez del Partido Colorado obtuvo el 46,44% de los votos, por encima de su principal opositor el liberal Efraín Alegre de Alianza Ganar, quien alcanzó el 42.74% de la votación. Los resultados muestran que el margen de la victoria entre los conservadores y la oposición fue muy estrecho, mucho más de lo señalado por los sondeos previos. Con el triunfo del candidato conservador, el Partido Colorado, heredero de la dictadura de Alfredo Stroessner, prolongará su pertenencia en el poder luego de casi 65 años en el Gobierno y con una breve interrupción del periodo liberal entre 2008 y 2013. No obstante, aun cuando la victoria de Abdo Benítez podría asegurar la continuidad en el programa de gobierno y el modelo económico basado en una gran participación de la inversión extranjera y en el que las cifras macroeconómicas contrastan con un reclamo en relación con las amplias desigualdades sociales, dicha continuidad dependerá de los resultados legislativos donde es probable que el Partido Colorado tenga que construir nuevos puentes con la oposición.